Por lo general, los diámetros utilizados para los micropilotes son de 15 cm y 30 cm, dimensiones que permiten su instalación incluso en espacios con restricciones físicas importantes. Estos elementos están conformados por armaduras tubulares, conocidas como “tubbing”, o por barras de hierro combinadas con estribos, seleccionadas según las necesidades estructurales y los esfuerzos.
El proceso de instalación de los micropilotes inicia con la perforación del terreno mediante equipos especializados, capaces de alcanzar profundidades variables dependiendo de las características del suelo y las especificaciones del diseño. Una vez ejecutada la perforación, se introduce la armadura y se inyectan con mortero o lechada de cemento a presión; puede ser inyección IRS (inyección repetitiva selectiva) la cual la lechada se inyecta en tramos localizado y en varias fases, se usa en suelos granulares y cohesivos excepto en suelos duros; y la inyección IGU (inyección global única) en la que la lechada se introduce en una sola fase por el interior de la armadura tubular, se usa en suelos granulares, rocas sanas y suelos cohesivos duros.

A modo de referencia, a continuación podrá conocer nuestro equipamiento y que hemos ejecutado en relación a la ejecución de Micropilotes.